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 ” Conocer y, no obstante, pensar que no conocemos es el más alto logro;

no conocer y sin embargo pensar que conocemos es una enfermedad. “

Somos unos gran desconocedores de nuestro espacio interior. Al igual que un trabajador eficiente con el tiempo automatiza los procesos, los ejecuta una y otra vez sin preguntarse el porque, ni las forma de mejorarlos, nosotros asimilamos como algo normal muchas cosas importantes de nuestra vida. Es en este momento, en el que empiezan a carecer de verdadero valor para nosotros. 

A quien no le ha sucedido alguna vez que cortando jamon, o cualquier otro delicioso manjar, con la mente a millones de kilometros del cuchillo y el jamon, de repente fue mas alla de lo que queriamos cortar y nuestro dedo meñique sufrio toda nuestra torpeza?. Despues de 25 años, pensando que tu dedo meñique estaba ahí tan solo para pulsar la tecla A, ( o Ñ si hablamos de la mano derecha) descubres que tiene muchas mas utilidades de las que jamas te habias planteado. Piensas que tu cuerpo es una maquina de relojeria en perfecta armonia, que todas sus piezas son iguales de importantes para su correcto funcionamiento.

Cuando el dedo se recupere no estaremos ganando nada nuevo, pero no obstante sera gratamente beneficioso, pues ahora por primera vez seremos conscientes de su importancia.

Extraviarse en el mundo interior está bien, pues en el regreso a nuestro centro, dejaremos de ser ajenos a el.

Para concer algo, hay que perderlo.

Puede que sea la frase mas importante, y la mas relacionada con el despertar. Es necesario identificar nuestras prioridades y ajustarlas, e intentar enfocar todo nuestro esfuerzo a conseguirlas. No hay nada como que notes que el tiempo se acaba para ser mas consciente de esto.

Un anuncio de tv decía algo como esto:

 “ Imagina que todos los días, por la mañana, te encontraras en tu puerta 1.440 euros. Podrías dárselos a la gente, o usarlos para divertirte, o simplemente tirarlos. Pero, hicieras lo que hicieras, los que no hubieses usado al llegar la noche desaparecerían.

La vida es igual, solo que en vez de 1.440 euros, cada mañana al levantarte te encuentras 1.440 minutos. Tú decides qué hacer con ellos. “

La costumbre es el mayor enemigo a la hora de vivir la vida… terminamos haciendo mal uso de nuestros minutos, excusándonos en un mejor futuro.

Nuestra conciencia revolucionaria se duerme, sin darnos cuenta nos llenamos de excusas diariamente, e inconscientemente con las cuales saboteamos nuestro camino a la felicidad.

Nos acostumbramos a vivir encerrados, nuestro yo revolucionario desaparece. Nos acostumbramos a trabajar en sitios que no nos gusta, porque es necesario para vivir. Nos acostumbramos a salir tarde del trabajo, porque es necesario para ascender en la empresa. Cuando llegamos a casa, ya muy tarde apenas tenemos tiempo para cenar charlar, y en seguida a la cama. Nos acostumbramos a pensar que tenemos el finde para hacer lo que queramos. Ha pasado ese día y apenas lo hemos vivido. Nos acostumbramos a no planear los fines de semana, y pensar que el descanso después de una semana de duro trabajo es una recompensa mas que suficiente. Nos acostumbramos a pensar en las vacaciones como momento en el que realmente viviremos la vida, pero cuando llega este momento no somos conscientes de que hemos perdido la practica del disfrute durante ese periodo en el que permanecemos como zombis… Vamos a una ciudad a conocerla y el cansancio acumulado hace mella, no la disfrutas como realmente deberías hacerlo.

En definitiva, nos acostumbramos a ahorrar vida, nos acostumbramos a no quedar satisfechos plenamente al final de un día , pensando que ya vendrá un día mejor.

No debemos sufrir por todo esto, el cambio esta en nuestras manos, tan solo debemos ser conscientes e interiorizar la urgencia de un cambio a mejor. No debemos pasar por la vida sin vivirla. Debemos aprovechar la oportunidad. Ordenemos nuestras prioridades, nuestras ideas y pongamos todo nuestro esfuerzo en conseguirlas. Acostumbrémonos a vivir la vida, en vez en ahorrarla. Gastemonos todos los euros cada día, y sobre todo en cosas que nos llenen.

Yo ahora mismo cierro Internet  y me voy a pasear por mi pueblo… elige tu forma de vivirla. “ CADA DIA MERECE SER VIVIDO “